Los recientes enfrentamientos entre grupos del crimen organizado han provocado el desplazamiento de decenas de familias que denuncian también el reclutamiento de jóvenes
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- La huida desesperada de familias en el municipio de Frontera Comalapa quedó registrada en un video en el que se ve a hombres, mujeres y niños salir corriendo de sus casas. Los recientes enfrentamientos entre grupos del crimen organizado han desplazado a decenas de personas que no han dudado en tomar el camino a pie para no quedar atrapadas en el fuego cruzado.
El epicentro de los enfrentamientos y el presunto reclutamiento de los pobladores por parte de grupos criminales se ha concentrado en la localidad de Nueva Independencia, conocida popularmente como Lajerío, donde sus habitantes han documentado a través de videos cómo hombres armados han ingresado a las casas para llevarse a los más jóvenes y participar en actos delictivos, todo, bajo amenazas.
El miércoles pasado Frontera Comalapa, región fronteriza entre México y Guatemala registró varios enfrentamientos y bloqueos carreteros, lo que ha provocado que al menos 400 personas abandonen sus hogares en las comunidades de Lajerío, Candelaria, 24 de Febrero y Nueva Libertad, donde la violencia ha atemorizado a las familias.
En el Ejido Candelaria -ubicado a unos 40 minutos de la cabecera municipal- se registró el desplazamiento de al menos un centenar de familias que debieron dejar sus pertenencias, animales y patrimonio, por temor a que sus hijos fueran reclutados por el crimen organizado o perdieran la vida por las balaceras.
Las denuncias de los pobladores llegan a través de publicaciones en Facebook, en las que a través de videos y fotografías se ha documentado cómo negocios han cerrado y las escuelas suspendidos clases. Extraoficialmente se ha informado que seis jóvenes fueron llevados a la fuerza en la comunidad de Lajerío.
Los grupos delictivos han dejado leyendas y amenazas en las paredes y colgado lonas, identificándose como un grupo delictivo.
El miércoles, hombres encapuchados quemaron un tráiler de una empresa privada, en la carretera Ocozocoautla-Las Choapas, en el kilómetro 150 de la vía, por lo que la circulación vial estuvo suspendida por más de seis horas.
La violencia se ha extendido a los municipios de Mazapa de Madero y Amatenango de la Frontera -municipios aledaños a Frontera Comalapa-, donde se reportaron quemas de camionetas para bloquear la vía y lonas con mensajes amenazantes.
LOS MUERTES QUE NO SE CUENTAN
En el ejido Nueva Independencia, una madre ha reportado la muerte de su hijo que fue alcanzado por una bala mientras se encontraba en el patio de su casa.
En la comunidad Chamic, un hombre fue asesinado frente a su motocicleta, según un vídeo difundido este viernes, en el que se aprecia el cuerpo a pocos metros de un bloqueo carretero.
Ante ese escenario, la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos «Todos los Derechos para Todas y Todos (Red-TDT), emitió un pronunciamiento en el que manifestaron la «preocupación e indignación del recrudecimiento de la violecia que se está viviendo en diferentes territorios de Chiapas, el cual se ha venido denunciado».
Las organizaciones, señalaron: «Nos parecen particularmente graves los hechos sucedidos los días 24 y 25 de mayo en los municipios de Frontera Comalapa, Chicomuselo, La Trinitaria y Amatenango de la Frontera», donde «comunidades enteras incomunicadas por bloqueos de carreteras y caminos, cortes de luz eléctrica, enfrentamientos armados, secuestros, reclutamiento forzado, y muerte a quienes oponen alguna resitencia».
Ante ello, la Red TDT exigió al Estado mexicano «intervengan de manera urgente para frenar la violencia y el terror que se viven en la región frontera de Chiapas».
UNA ORACIÓN
Habitantes de varias comunidades de Frontera Comalapa han pedido orar por la paz en el municipio. Este jueves se realizó una cadena de oración a las 22:00 horas.
Hasta el momento ninguna autoridad ha confirmado el número de muertos en la región, aunque los habitantes aseguran que varias personas han muerto.
