Han pasado tres años desde que 74 familias huyeron de sus casas tras ser incendiadas
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Hace tres años, María Hidalgo Espinosa fue desalojada violentamente junto a otras 100 personas en la comunidad Yashchén del municipio de Venustiano Carranza. En la huida para salvar su vida y la de su familia, dejaron todo: la milpa, los animales y todas sus pertenencias.
Este miércoles, María, junto a una veintena de desplazados, llegó a la capital del estado para manifestarse frente a Palacio de Gobierno, donde exigieron a las autoridades reubicar sus viviendas y la reparación del daño, luego de tres años sin ser escuchadas ni recibir ningún tipo de apoyo, a pesar de las promesas que se les han hecho.
Los hechos ocurrieron el 26 de abril de 2020, cuando un grupo paramilitar quemó 17 viviendas de la comunidad, afectando a más de 74 familias que perdieron su patrimonio, recordó Manuel Santos Hidalgo Espinosa, uno de los desplazados.
Hidalgo Espinosa, afirmó que integrantes de la Alianza Campesina de San Bartolomé de Los Llanos fueron quienes quemaron la mañana del 26 de abril de 2020, para despojarlos de sus tierras y en represalia por renunciar a la organización campesina.
El vocero de 13 familias afectadas dijo que, si bien el secretario general de Gobierno ha pedido reparación por los daños y sus bienes a los desplazados, la autoridad ha hecho caso omiso de su demanda.
María dice que no sabe por qué les prendieron fuego a sus casas, pero creen que todo fue orquestado por el Estado mexicano, en beneficio del ex delegado de gobierno de Venustiano Carranza, Enrique Aguilar Martínez.
Madre de tres hijos, María lamenta que tras ser desplazada de su comunidad no ha recuperado la paz ni sus pertenencias. Su forma de vida cambió, pues en la ciudad donde vive actualmente, no cuenta con un lugar de tierra para sembrar maíz.
Las familias desplazadas solicitaron la intervención del gobernador Rutilio Escandón Cadenas, para que 14 familias puedan ser reubicadas en Tuxtla Gutiérrez, ya que son 20 niños y niñas quienes se encuentran sin hogar.
Los indígenas desplazados denunciaron por omisión y comisión al gobierno municipal y estatal, castigo y desarticulación del grupo paramilitar del Paraíso del Grijalva.