La ejecución de Jerónimo Ruíz López, un líder de artesanos en San Cristóbal ha provocado la quema de viviendas y tiroteos, mientras sus habitantes y turistas tratan de refugiarse en sus viviendas
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- San Cristóbal de Las Casas, el Pueblo Mágico que en Semana Santa se posicionó como el destino turístico más visitado de Chiapas, volvió a convertirse en el centro de la violencia tras el asesinato de Jerónimo Ruiz López, un líder de artesanos vinculado presuntamente a un grupo criminal que en los últimos años ha desatado una ola de delincuencia e inseguridad en la región.
El asesinato de Ruiz López, ocurrido la mañana de este lunes a plena luz del día y frente a su casa en la colonia Nueva Esperanza, provocó la reacción de cientos de simpatizantes, hombres que desataron tiroteos, quemaron casas y bloquearon los accesos de varias colonias de la zona norte del municipio, que en las últimas semanas ha registrado otros hechos violentos.
Dos horas después del crimen y de que hombres encapuchados -en su mayoría jóvenes- dispararan al aire, el presidente municipal, Mariano Díaz Ochoa reconoció que el municipio vive «momentos delicados».
Sobre el escenario de violencia en San Cristóbal, el alcalde dijo en una entrevista que con el crimen de Jerónimo “no podemos a través de la fuerza o queriendo intimidar o querer negociar la ley o tomársela por propia mano y castigar {…} tenemos que seguir por la vía jurídica, tenemos que salvaguardar la integridad física y material de los habitantes”.
Díaz Ochoa ha prometido un operativo disuasivo y “barrido en las colonias” para detectar y detener a las personas armadas. “No podemos permitir ese tipo de actos vandálicos, a todos los que encontremos vamos a tener que llevárnoslo, necesitamos que se aplique la ley”.
Dijo que solicitó el apoyo de la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano y la policía estatal y municipal para desplegarse y tomar el control de la ciudad.
El alcalde llamó a los simpatizantes del líder indígena a a dejar todo en manos de la justicia y prometió encontrar a los responsables del asesinato.
De nuevo, el pánico
La última vez que habitantes y turistas huyeron de las balas en San Cristóbal de Las Casas fue el 8 de abril, luego de que grupos armados detonaran armas de fuego en pleno centro de la ciudad. Nueve días después, la ejecución de Jerónimo ha provocado el mismo escenario en el que mujeres, hombres y niños huyen de las balas para refugiarse en sus casas.
Durante cinco horas, las balaceras y quema de viviendas no han cesado en diversos puntos de San Cristóbal, mientras varios negocios permanecen cerrados y las escuelas del turno vespertino suspendieron las clases.
Jerónimo Ruiz había sido vinculado al grupo delictivo denominado “Motonetos”, señalados como los principales narcomenudistas de San Cristóbal de Las Casas, ciudad que recibió más de 84 mil turistas nacionales y extranjeros durante la Semana Santa.
Desde la montaña de Cuxtitali, los pobladores han oído los disparos. En un vídeo compartido en Facebook, un habitante muestra el hueco en el techo de lámina de su vivienda que le provocó una bala. “Bala perdida, bala perdida”, dice el indígena, mientras muestra el proyectil.
Por ahora se sabe que dos sujetos a bordo de una motocicleta sin placas de circulación habrían perpetrado la ejecución del líder de los artesanos. Una fotografía de los presuntos autores materiales ya circula en las redes sociales.