Natividad fue asesinada y su cuerpo, con signos de tortura, fue abandonado en un camino comunitario que conduce a su vivienda, en la comunidad Panwitz, cerca de Jolnopa Guadalupe, municipio de Tila, al norte de Chiapas.
El hallazgo fue confirmado por la Comisión Estatal a una Vida Libre de Violencia de las Mujeres de la Colectiva 50+1, que documentó el caso como feminicidio.
De acuerdo con la organización, este crimen eleva a 31 el número de mujeres asesinadas por razones de género en Chiapas en lo que va del año. La colectiva subrayó que no se trata de estadísticas, sino de una violencia sostenida que continúa cobrando vidas sin una respuesta efectiva del Estado.
Testimonios recabados por la colectiva indican que el cuerpo de Natividad presentaba huellas evidentes de tortura. El hecho de que fuera localizado en una zona de paso habitual para la comunidad ha incrementado la preocupación entre habitantes de la región, quienes enfrentan un clima de inseguridad persistente.
Hasta ahora, las autoridades no han informado sobre personas detenidas ni avances en la investigación, lo que refuerza el riesgo de impunidad en un contexto donde los feminicidios se repiten sin esclarecimiento.
La agrupación exigió una investigación inmediata, seria y con perspectiva de género, así como acciones concretas para proteger a las mujeres de Tila y del resto del estado. También reiteró la necesidad de revisar y ampliar la Alerta de Violencia de Género, ante la continuidad de casos de violencia extrema contra mujeres en distintos municipios de Chiapas.
