Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Aunque México registra en lo que va de 2023, 58 por ciento menos localidades con casos de malaria o paludismo, en comparación con 2022, Chiapas es considerado como un “foco rojo” por sus casos activos a nivel nacional.
De acuerdo a datos del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) de la Secretaría de Salud mencionó que del 2019 al 2023, del total de zonas consideradas focos activos, 72 por ciento ya son residuales, debido a que no han registrado transmisión en un periodo de uno a tres años.
Hasta esta fecha, 28 entidades federativas se encuentran libres de esta infección parasitaria y continúan activos 21 focos, de los cuales 17 se ubican en Chiapas; dos en Tabasco, uno en Campeche y uno en Oaxaca.
Hasta la semana epidemiológica 42 de 2023, se registraron 32 casos de paludismo autóctono, lo que representa 72 por ciento de disminución en comparación con 2022, cuando ocurrieron 123 casos. De los 32 registros, 25 se localizan en Chiapas, cuatro en Tabasco, dos en Oaxaca y uno en Campeche.
El paludismo o malaria se transmite por la picadura del mosquito hembra del género Anopheles infectada por las especies del parásito Plasmodium, conocidas como falciparum y vivax.
