Claudia Sheinbaum cerró su proceso de precampaña con un evento masivo en el Monumento a la Revolución, en el que convocó a figuras que se habían alejado del movimiento, como Marcelo Ebrard y Antonio Pérez.
La virtual candidata abrazó al excanciller al subir al templete, cerrando meses de disputa política y acusaciones de derroche de recursos públicos en el proceso partidista.
En su discurso, Sheinbaum destacó que en su movimiento sí hay unidad, incluyendo a los políticos que participaron en el proceso de encuestas.
Dijo que en la ‘derecha’ hay una división interna por su falta de cumplimiento a los pactos inconfesables.
Afirmó que ella participa en el movimiento social y político más fuerte del planeta.
Sheinbaum dijo que la defensa de la democracia no es un arma de la derecha, pues afirmó que su movimiento ha luchado en contra de los fraudes electorales, la democracia sindical y otras batallas.
Negó que los opositores puedan reivindicar el valor de la libertad, pues dijo que ellos representan a los gobiernos que censuraron periodistas, encarcelaron líderes sociales, que dispararon a estudiantes y contra estudiantes.
Sostuvo que los opositores tienen como valor “libertad de aplastar al más débil” o “la libertad de acabar con el planeta”.
Con información de: Aristegui Noticias